Los amortiguadores, junto con los neumáticos, hacen que te mantengas pegado a la carretera además de absorber las irregularidades del terreno para un buen confort en la conducción. Forman parte junto con neumáticos y frenos del llamado triángulo de seguridad de un vehículo. Son una de las principales partes del sistema de suspensión y la mayoría de las veces los grandes olvidados para todos los conductores.

Su desgaste gradual, hace que pase desapercibido para la mayoría de los conductores y algunos de sus síntomas podrían ser:

• Rebote excesivo del coche. Un aumento del rebote del coche al pasar un bache, esto suele indicar que los amortiguadores no funcionan bien.
• Falta de estabilidad en curvas o frenadas fuertes. Variaciones en la dirección al paso en curvas para corregir trayectorias por falta de estabilidad o movimientos extraños y mayor distancia para detener el coche en frenadas fuertes.
• Ruidos extraños al bachear o al paso por curvas. Aquí la cosa es más grave, cuando un sistema de amortiguación hace ruido suele haber un problema serio y que hay que solucionar lo antes posible.
• Desgaste irregular de neumáticos. Unos amortiguadores en mal estado provocan un desgaste irregular en los neumáticos, pudiendo provocar daños y que los tengamos que sustituir antes de lo previsto.
• Vehículo desnivelado. Este síntoma suele estar más destinado a suspensiones neumáticas donde el coche suele “caerse” en la zona donde el amortiguador está mal.

Resumiendo, unos amortiguadores en mal estado provocan en tu coche:

– Falta de adherencia en curva.

– Aumento notable de la distancia de frenado.

– Aquaplaning.

– Averías costosas en resto de componentes en sistema de suspensión.

– Mal funcionamiento de los sistemas electrónicos de seguridad (ABS, ESP, etc.)

Como podemos ver, síntomas bastante peligrosos para los ocupantes de tú coche y que debes corregir cuanto antes.

Según los fabricantes cada 60.000 km. es recomendable sustituir los amortiguadores, revisarlos cada 20.000 km. para comprobar su correcto funcionamiento y su grado de desgaste te podría evitar más de un susto.

Revisa los amortiguadores en cada mantenimiento de tú coche o si notas alguno de los síntomas que te indicamos.